1. Especie Humana-Esfera Material

2. Familia Física-Esfera Energética

3. Cultural- Esfera Mental

4. Humanidad-Esfera Sistémica

5. Sistema Planeta Tierra-Esfera Electromagnética

6. Realidad (Sistema Creado)-Esfera Cuántica

7. Sistema Kármico-Esfera de Luz

8. Sistema Onírico-Esfera Onírica

9. Familia Espiritual-Esfera Espiritual

10. Familia Universal-Esfera Matricial

11. Sistema Global-Esfera Total

El primer sistema al que pertenecemos es la Especie: homo sapiens sapiens, especie animal mamífero homínido que lleva desde la prehistoria acumulando un bagaje físico que lo arrastramos todos en nuestro cuerpo material, incluso desde antes. Según los testajes las dataciones nos llevaría a civilizaciones antiguas de las que no se muestra registro.

El segundo sistema a través del que la vida nos es imbuida es la Familia física en la que hemos nacido. Existe la falsa idea de que “hemos elegido nacer ahí por alguna razón trascendental”, hay muchas teorías religiosas o espirituales que hablan de ello. Es una trascendencia falsa, son los parásitos energéticos los que se encargan de hacerte caer en una estructura familiar disfuncional que concuerda potencialmente con todos los bloqueos y heridas que arrastras de otras vidas. Cuanta más atención le das a los problemas, más enganche se produce y menos posibilidad de deshacerte de ellos. La solución es resetearlos para poder elegir otro camino y acabar de una vez con la repetición de todos los problemas y conflictos no resueltos provenientes de nuestros ancestros familiares heredados generación tras generación.

El poso de la esfera mental en lo sistémico es la Cultura, la forma bonita también de llamar al condicionamiento específico de cada país, región o lugar. Lejos de ser una transmisión artística o una forma de convivir y adaptarse al entorno, se ha convertido en un instrumento de alienación y anulación de la diversidad y de la individualidad. Gran parte de los sistemas de pensamiento están condicionados por esta esfera tan manipulada.

La Humanidad, no hay más que mirar cualquier capítulo de la historia para ver que se llevan repitiendo los mismos conflictos y las mismas injusticias desde hace milenios. La sistematización del conflicto y el poder corrupto como forma de codificar la vida es un producto de los implantes, es así como se aseguran de mantener el “ganado” con la energía bloqueada que necesitan para poder alimentarse a través de nosotros. Además, es la manera en la que se aseguran de que estemos desprovistos de toda forma de rebelión y de evolución que pueda desenmascarar su juego y dejarles sin el botín. Este atraco, el robo de energía en cualquier formato es lo que traduce las relaciones humanas a nivel ordinario. Hay que hacer un esfuerzo tremendo para no caer ahí y para que el resto de “caídos” no te devoren por los pies.

El entorno sistémico en el que se manifiesta la vida es la Tierra como planeta. Como ser vivo registra, al igual que nosotros, todo tipo de bloqueos, contaminación y parásitos que nos condicionan la vida a todos sus habitantes.

Como consecuencia de los sistemas anteriores se construye la Realidad, que corresponde con la huella cuántica que proyectan los 5 primeros sistemas en su conjunto. Cuando no somos capaces de ser los verdaderos arquitectos de nuestra realidad, ésta nos viene dada por inercia y nos arrastra en un movimiento programado que sabotea cualquier propósito personal y en el que las personas se identifican sin saber si realmente están viviendo su vida.

El Karma es la ley de causa-efecto, esto no tendría que ser ningún problema. Pero como ya hemos visto ha sido utilizado desde siempre para hacernos caer infinitas veces en los mismos errores, obstáculos, calamidades, resistencias, problemas, muertes, problemas, dolores, sufrimientos…etc. En los sueños se representa la segunda función del teatro de nuestra vida. No tendría porqué ser el segundo pase de nuestra película, de hecho es uno diferente, pero de forma ordinaria así lo es. Esto hace que no sepamos cuál es la naturaleza de nuestra existencia onírica y que sepamos poco de su funcionamiento. Como sistema es una forma de expresión del espíritu y como hemos dicho este sistema Onírico no está separado de la realidad dura, además tiene sus propias características que veremos más adelante. En lo que se refiere a lo sistémico tiene la impronta de la relación entre el espíritu y los 7 niveles anteriores, lo cual suele generar bastantes asincronías, descoordinaciones, conflictos y rupturas.

Otra familia es la familia espiritual, es el sistema del que provienes, el planeta de origen de tu espíritu. Igual que en los casos anteriores, la historia que arrastra cada uno es muy distinta y el trabajo no consiste en resolverla sino en deshacerla. Hemos llegado al punto de identificarnos con lo que nos ha pasado que lo que verdaderamente somos queda escondido debajo del síndrome de Estocolmo que nos atrapa. Ya ni siquiera recordamos nuestra esencia, la raíz de nuestro espíritu, vagamente la intuimos. Si nuestras esferas recuerdan todo lo que llevan adheridas y bajo el mismo que se replica toda la información que nos mantiene en bucle, quiere decir que tras esta polución existe la posibilidad de recordar quién somos en realidad. Si somos capaces de limpiar todas las capas que nos tapan y enmascaran, nuestra esencia natural aflorará y será accesible a nuestra vida.

Por último tendríamos la Familia Universal que estaría compuesta por los diferentes habitantes de los distintos planetas. Estas relaciones aunque no las hemos vivido hoy en día de forma consciente, tenemos la memoria de cómo fueron y sobre todo durante todos estos periodos de conflicto entre especies que se generó hace eones y que aquí no tenemos registro.

Tal y como hemos visto con los movimientos esféricos, unos llevan a otros y conforman unas esferas más grandes cuando se combinan entre sí. De esta manera es como surge el Sistema Global, que sería el sumatorio de todos los 10 sistemas, que generan unos registros y unos patrones que le son devueltos como una imagen especular. Este espejo es un generador de bucles de repetición donde también va a ser muy necesario resetear para poder librarnos de estos remolinos asfixiantes. En las esferas anteriores se trabaja y activa la limpieza y desintoxicación en los tres primeros niveles: físico, energético y mental. El trabajo seguirá incidiendo sobre estos niveles anteriores, todo está intrincado y la descontaminación seguirá produciéndose. En esta cuarta esfera, empieza la siguiente fase de Sphere Reset : la Reconexión con el Espíritu. En toda la existencia de cada ser humano están las incógnitas no respondidas que todo el mundo se pregunta: ¿Quién soy? ¿Qué hago yo aquí? ¿Cuál es mi propósito en la vida? Es crucial deshacerse de toda la basura externa amontonada encima de lo único que puede responder a estas incógnitas: tu espíritu. Según vamos abriendo hueco, vislumbramos el espacio necesario para que nuestro espíritu se expanda y veamos la grandeza de lo que somos. Es sólo a través de estos ojos como podremos desprendernos de la visión de la calamidad que nos persigue y que no hace honor al verdadero poder que se esconde tras estas cortinas de residuos. Volver a conectar con tu espíritu conlleva, no sólo resetear esta suciedad que lo impide, sino activar aquello que ha estado en letargo durante muchísimo tiempo y que necesita volver a funcionar.